Por Guillermo Robles Ramírez
Por más que con publicidad se quiera hacer creer a los mexicanos que el actual gobierno federal Morena, está trabajando por erradicar la corrupción, ésta permanece como en los viejos tiempos, igual que ellos, los ahora funcionarios de Morena, critican férreamente. Para muchos ciudadanos, los de ahora, son igual o peor de ratas que los de antes del cambio, pues como todo lo que avanza, están mejorando las tácticas y métodos y aun cuando ahora son más finos, no dejan de ser corruptos, finos si así se desea identificarlos, pero a final de cuentas, ratas.
No es algo que lo esté inventando, ya que, de acuerdo a la última encuesta en el mes de octubre 2022, sobre la percepción que tienen los mexicanos con respecto al tema de la corrupción en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, desde la plataforma de Elige México, una organización no gubernamental y sin fines de lucro; dando a conocer que 6 de cada 10 mexicanos consideran que el Presidente, Andrés Manuel López Obrador, y su gobierno son corruptos, es decir, más de la mitad de los mexicanos.
Esta tendencia ha ido al alza conforme pasa el tiempo del actual gobierno federal de Morena, ya que como referencia en su segundo año de mandato López Obrador; los mexicanos y mexicanas consideraron que la corrupción aumentó por encima del doble respectivamente en el año 2019, con un 12% a un 29% en el 2021, lo anterior publicado en la Tercera Encuesta Nacional Sobre Corrupción e Impunidad. En la misma encuesta revelan que el principal motivo de este incremento a la corrupción se debe a la pobreza y desigualdad en nuestro país, así como el 74.8% de hombres y mujeres consideran que la impunidad y falta de castigo son otros factores.
Sin embargo, así como estas estadistas y otras más están muy apegados a la realidad, ya que con mucha regularidad leemos y nos enteramos de corruptelas de funcionarios de la actual administración federal.
Están publicadas aquellas adquisiciones que se han hecho sin una licitación pública, siendo asignadas directamente, aun cuando en el Art. 134 de la Constitución Mexicana viene muy detallado sobre éstas convocatorias. Sobre el mismo tema y, haciendo un punto de comparación, así como le gusta tanto lo hace AMLO; en el actual gobierno de Morena se han realizado el 80% de las compras directas que cuando estaba Enrique Peña Nieto, cuando fue Presidente de México. Ante tal contraste, la verdad de las cosas es que deja exonerado de cualquier delito de corrupción a Peña Nieto.
También está publicado en medios de comunicación de los presuntos casos de corrupción de la Casa Gris, del hijo de AMLO, así como el de su hermano Pío López Obrador, la caída del tramo elevado de la línea 12 del metro de la CDMX con posibles sospechas implicados Claudia Sheinbaum Pardo y Marcelo Ebrard Casaubón, programas sociales dudosas como las Becas del Bienestar, Jóvenes Construyendo el Futuro, así como el barril sin fondo de Pemex, los contratos de CFE y la compra de carbón, entre otros más.
En las fronteras mexicanas con los Estados Unidos, siguen pasando diariamente no al menudeo, sino en tráileres repletos de televisores, ropa usada, electrónicos, tenis y otros artículos extranjeros. En las pulgas, lo mismo de Coahuila que de otras Entidades, los artículos extranjeros sin pago de impuestos, es lo que predomina.
En las distintas direcciones de Petróleos Mexicanos, el negocio de contratos sin concurso y al mejor y mayor postor, es la actividad del día. En la Secretaria del Medio Ambiente, sigue el enriquecimiento de funcionarios en la venta de permisos o concesiones para limpiar contaminaciones ambientales.
Definitivamente, el cambio que vemos es exclusivamente de personas, es decir, se fueron unas ratas y vinieron otros, nuevos y probablemente un poco más elegantes, pero persistimos, no dejan de ser ratas, o ¿cómo creen que se ha continuado la construcción del Tren Maya que afecta al medio ambiente?
La corrupción no se combate con papel ni declaracioncitas (diarrea verbal), sino con hechos, con programas en los que se trabaje desde abajo porque de nada sirve se cambie a la cabeza, si los mandos medios siguen no solo con trabajo, sino con los grandes negocios que crecen al cambiar a su jefe antiguo y poner uno nuevo que su argumento es que están novatos y aprendiendo, aunque los platos rotos durante ese aprendizaje los paguen los mexicanos, además del riesgo que ya cuando aprendan las cosas, se acabó el sexenio. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México) www.intersip.org